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domingo, 30 de septiembre de 2018

Review - MILLA 22: EL ESCAPE


By on 12:53 p.m.




Milla 22: El Escape (o simplemente Mile 22, como dicta su título original) es otra colaboración entre el actor/director Peter Berg y Mark Wahlberg, luego de Patriots Day, Deepwater Horizon, y Lone Survivor. Y no, no los menciono como si fueran un gran dúo artístico, a la altura de Martin Scorsese y Robert De Niro, sino más bien al nivel de Adam Sandler y Kevin James.

La historia gira en torno a un grupo comando de nombre Overwatch (nada que ver con el juego), liderado por un hombre conocido como Bishop, el cual es interpretado por John Malkovich en zapatillas. Overwatch es el clásico grupo de operaciones encubiertas que hace el trabajo sucio que los demás no pueden hacer para no manchar su buen nombre; lo de siempre, bah. Pero mientras Bishop supervisa y brinda toda la información desde un galpón sin despeinarse, los que realmente aprietan el gatillo son los agentes en el campo, liderados por James Silva (Wahlberg) y Alice Kerr (Lauren Cohan). Cuando un agente de inteligencia extranjera (Iko Uwais) se aparece frente a la embajada norteamericana en el Sudeste de Asia ofreciendo información vital respecto a la posibilidad de un ataque terrorista que Overwatch venía investigando, el asiático exige a cambio que se lo traslade fuera del país. Silva, Kerr, y el resto de su escuadrón deberán recorrer las 22 millas que hay entre la embajada y el aeropuerto, adentrándose en territorio enemigo mientras fuerzas militares, policiales y locales intentan "recuperar" al soplón.

James Silva tendrá nombre de jugador de fútbol uruguayo, pero es el líder de un escuadrón militar.

Si la memoria no me falla, desde aquella escena de Patriot Games en 1992 (con Harrison Ford interpretando a Jack Ryan), suelo engancharme con las películas de acción que cuentan con una gran emboscada en su desarrollo. En este aspecto, Milla 22 se asemeja (o, por lo menos, tiene la intención de hacerlo) a la trepidante Black Hawk Down de Ridley Scott, donde prácticamente toda la película es una gran gran emboscada. Pero... claro, Peter Berg no es Ridley Scott ni en sus sueños más húmedos. En consecuencia, Milla 22 tiene buen ritmo, es dinámica, sus protagonistas escapan de una pésima situación para meterse en una peor, pero no termina nunca de sorprender. Ojo, tampoco tiene la obligación de hacerlo (rechazo ese concepto de que todo film debe sorprender al espectador). Digamos simplemente que es entretenida pero lejos de ser innovadora.

No obstante, hay algunas cositas que realmente me incomodaron. Para comenzar, uno de los problemas que tuve fue que el guion intentara convencerme que Wahlberg es una especie de niño prodigio devenido en genio estratega militar. Berg intenta vendernos esta idea en una secuencia previa a los títulos iniciales, y simplemente debemos creerle... porque sí. No tengo ningún problema con Wahlberg como héroe de acción y capitán de algún escuadrón o algo por el estilo, pero... ¿genio militar? ¿En serio? Para empeorar las cosas, Silva, su personaje, es un tipo sinceramente insoportable: engrupido, pretencioso, sin tacto para tratar con la gente que lo rodea y confía en él. Después de los primeros dos diálogos, es inevitable que el espectador piense "OK, será un capo militar, pero este tipo es un forro".

Oh, Lauren...

Por suerte no tuve ese problema con Alice Kerr, la segunda en la cadena de mando. Es más, la amo. Lauren Cohan usa todo lo que aprendió matando zombies durante años en The Walking Dead y lo eleva al cubo. Se muestra desenvuelta y firme como heroína en un film de acción, algo que seguramente le dará rédito en el futuro próximo (por algo este año se va de la serie para protagonizar otra). Además, Cohan tiene la habilidad de expresar la mirada más jodida que te pueda dar una mujer y al instante sonreír de la manera más encantadora del mundo (ya mencioné que la amo, ¿cierto?).

Pero sin lugar a dudas, y tal como preveía, el MVP acá es Iko Uwais. Varios lo conocimos como el protagonista de ambas entregas de The Raid (voy a seguir diciéndolo: la mejor película de acción de la década) y sabemos perfectamente qué podemos esperar de él: escenas de pelea brutales, intensas, sangrientas, como no vemos en ninguna otra producción del género. ¡Así es como debería lucha Iron Fist! Uwais es literalmente una máquina, una bestia, que disfruta utilizar cualquier cosa que tenga a mano, cual Jackie Chan despiadado.

"Tiene cara de boludo, pero así como lo ven te mata a 5 por día."

El gran inconveniente que esto conlleva es que justamente queremos verlo más tiempo en pantalla, queremos seguir viendo cómo le resfriega la cara a los malosos contra la ventana rota de una camioneta (sí, hace eso, y es hermoso). Pero Uwais no es el protagonista; son Wahlberg y Cohan. Por lo tanto, nos quedamos con ganas de más y lamentando que el director Gareth Evans no haya cumplido su promesa de hacer The Raid 3. Como se darán cuenta, si estamos viendo una película original pensando en por qué carajo no hicieron la tercera entrega de otra saga... bueno, es un problema. Es más, en un momento del film, cerrando el segundo acto, los protagonistas quedan atrapados en un edificio de viviendas y deben luchar para escapar y/o sobrevivir; es casi un guiño de parte de Berg a la primera The Raid, lo cual es echarle más nafta al fuego.

Pero, aún después de eso, quizás el colmo sea que (mínimo SPOILER) al final comprobamos que al personaje de Wahlberg (ese que nos quisieron vender como genio estratega) lo boludearon una y otra vez, en un juego del gato y el ratón que parece sacado de una película más inteligente. Es como si en el clímax los realizadores hubieran querido sorprendernos con un "¡A-já!" mediante una revelación que se cree más inteligente de lo que es, pero solo consigue hacernos recordar a aquella clásica frase de Los Simpsons...



VEREDICTO:  6.5 - MEH-LLA 22

Milla 22: El Escape tiene una premisa accesible que se presta para un buen film de acción. Y por momentos lo es, superando la cuestionable e infumable personalidad del protagonista en la piel de Mark Wahlberg. Por suerte detrás suyo están Lauren Cohan e Iko Uwais, que logran levantar todo a base de personalidad y peleas brutales. Pero, irónicamente, Uwais termina levantando demasiado cada escena donde aparece. Y el resultado final es que abandonamos la sala pensando solo una cosa: "¡¿Para cuándo The Raid 3?!".


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