En un futuro no muy lejano, frente a un contexto de infertilidad y escasez de comida por los cambios climáticos, un grupo de coroneles militares de ultra derecha derroca al gobierno democrático de Estados Unidos y se impone como una dictadura. Lo primero que hacen es revocar todos los derechos de las mujeres y establecer nuevas reglas: cada Coronel vivirá con su esposa y su "Handmaid" (criada), una de las pocas mujeres fértiles que quedan. Estas criadas serán las encargadas de engendrar un hijo de su respectivo Coronel, totalmente contra su voluntad y privadas de su libertad, por supuesto.
Esta es la premisa de la serie dramática original de Hulu: The Handmaid´s Tale (El cuento de la Criada), basada en el libro de 1985 escrito por Margaret Atwood. Creada por Bruce Miller (productor de ER, The 100) y con la producción ejecutiva de su protagonista Elisabeth Moss (Mad Men, The One I Love), la serie no se toma a la ligera su premisa y plantea este futuro distópico como algo que tranquilamente puede suceder en cualquier momento. Eso es lo que la hace tan escalofriante, y una de las mejores series en lo que va del año.
La historia se centra en June (Moss) quien fue separada por los militares de su esposo Luke (O-T Fagbenle) y su pequeña hija al tratar de escapar hacia Canadá. June es enviada a convivir con otras mujeres fértiles en un centro de detención, donde otras mujeres -que forman parte del nuevo régimen y se denominan "Tías"- les explican violentamente las nuevas reglas; entre ellas se destaca la Tía Lydia: un personaje detestable, perfectamente interpretado por Ann Dowd (The Leftovers). Luego de un tiempo de estar allí cautiva, June es asignada como Criada a la casa de uno de los Comandantes más importantes de la dictadura, Fred Waterford (Joseph Fiennes, de Shakespeare in Love), uno de los que inició esta revolución junto a su esposa Serena (Yvonne Strahovski). Es allí donde June perderá su identidad y pasará a llamarse Offred en honor a su nuevo dueño.
Sí, todo muy normal.
A esta altura de la historia, me imagino se estarán preguntando: "¿Nadie se opone a esta locura?". Obvio, pero los matan a todos. Hay espías por todos lados y militares con ametralladoras cada cinco pasos. El país se encuentra completamente sometido a este nuevo régimen que demuestra ser imparable y arrasador. Los Comandantes cambiaron todos los nombres de las ciudades, y se asentaron en un pseudo-barrio privado llamado Gilliad. Allí todo es muy old school: no hay internet, no hay tecnología y todos tienen una forma específica de vestir para demostrar su rol en esta nueva sociedad. Pero en toda guerra siempre hay una resistencia, y es esa pequeña esperanza lo único que mantiene a las Criadas relativamente cuerdas.
Sí, todo muy normal.
A esta altura de la historia, me imagino se estarán preguntando: "¿Nadie se opone a esta locura?". Obvio, pero los matan a todos. Hay espías por todos lados y militares con ametralladoras cada cinco pasos. El país se encuentra completamente sometido a este nuevo régimen que demuestra ser imparable y arrasador. Los Comandantes cambiaron todos los nombres de las ciudades, y se asentaron en un pseudo-barrio privado llamado Gilliad. Allí todo es muy old school: no hay internet, no hay tecnología y todos tienen una forma específica de vestir para demostrar su rol en esta nueva sociedad. Pero en toda guerra siempre hay una resistencia, y es esa pequeña esperanza lo único que mantiene a las Criadas relativamente cuerdas.
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| En el curso avanzado de Cómo Dejar que te Viole un Coronel. |
La serie utiliza flashbacks en todos sus episodios, para mostrarnos cómo surgió esta dictadura demencial y para ahondar en las vidas pre-guerra de los personajes principales. Lo interesante es que nos deja ver tanto la vida de June y Luke, como la de Serena y el Coronel: o sea, de los "buenos" y los "malos". Esto es genial porque, como espectadores, podemos tratar de entender cuáles son las motivaciones de ambos bandos y cómo se trataban entre ellos antes de todo este caos.
Por supuesto esta dictadura religiosa no tolera a los homosexuales y sólo perdona la vida de las mujeres fértiles, como es el caso de Moira, interpretada por Samira Wiley (más conocida como Poussey Washington de Orange is the New Black). Ella es la mejor amiga de June y es quien le da fuerzas para luchar contra el nuevo sistema.
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| ¡Washington no se murió! |
No quisiera spoilear nada, porque lo mejor que tiene la serie son los puntos de giro en su narración, pero el nivel de personajes sociópatas de esta serie es increíble. Todos son llevados al límite continuamente, y así es como vemos qué tan lejos están dispuestos a llegar por sus ideales y qué nivel de consecuencias están listos para afrontar.
En cuanto a sus aspectos técnicos, el director de fotografía Colin Watkinson realizó un trabajo perfecto. Todos los planos reflejan el estado de ánimo de los personajes en ese preciso momento y hace que ponernos en su lugar sea algo orgánico. La música es bellísima, grabada con orquestas en vivo, y el vestuario y el diseño de arte logran transmitir el contexto sin dejar dudas al respecto.
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| Esa fotografía ❤ |
The Handmaid's Tale nos hace vivir el drama en carne propia, nos hace cuestionar nuestro presente y cómo reaccionaríamos ante la posibilidad de este futuro donde las mujeres no tenemos ni voz ni voto. Está tan bien actuada, dirigida, filmada y editada que merece sin dudas el puesto número uno de las mejores series en lo que va del año.
Afortunadamente no tendremos que esperar demasiado para una segunda temporada, ya que la misma se encuentra actualmente en producción y se estima que la estaremos viendo los primeros meses del 2018.
VEREDICTO: 10 - NOLITE TE BASTARDES CARBORUNDORUM,
BITCHES
BITCHES
The Handmaid's Tale no solo es una serie perfecta a nivel técnico, sino que también presenta una excelente temática y un futuro distópico que no parece tan imposible, lo cual nos coloca rápidamente en el lugar de los personajes. Una serie para todas y todos; si te crees machista, vas a arrepentirte cuando veas de lo que somos capaces las mujeres.
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