Se ve que Netflix estaba ansioso por estrenar cuanto antes (¿o quería evitar cierta competencia en particular el fin de semana?), así que se adelantó un poco y ayer, alrededor de las 22 hs., anunció por Facebook que ya estaban disponibles todos los episodios de esta tercera temporada, como "recompensa por buen comportamiento". Bien jugado, Netflix... bien jugado.
Este año todo comienza con "Mother's Day", donde quizás queda representado, mejor que cualquier otro capítulo, todo lo bueno de la serie, desde la estructura hasta sus personajes y los temas que desarrolla; si tuvieras que utilizar de ejemplo un episodio en particular para definir a Orange is the New Black, o para recomendarle a alguien para que vea y conozca y se enganche, éste es el ideal.
El Día de la Madre es un día de visitas, actividades familiares y juegos infantiles... pero seguimos estando dentro de una prisión -por más que sea una de mínima seguridad-, así que el clima es definitivamente enrarecido: cada hijo/nieto/sobrino de debe anotarse en un listado antes de ingresar, soportar por momentos el maltrato verbal de gente que no está acostumbrada a lidiar con niños -o directamente los detestan-, y hasta contemplar atónitos como sus madres deben permanecer en el suelo, inmóviles, cuando suena la alarma porque se perdió una niña. La voz de una hija preguntando "Mamá, ¿qué pasa? ¡Levántate!", escuchar el llanto de los más pequeños asustados, o la imagen de un globo suelto elevándose lentamente hacia un cielo azul, es el recuerdo más fuerte y evidente de que... todo muy lindo, festejar con los chicos, todo muy alegre, pero... es sólo momentáneo. La cruda realidad, la vida diaria de estas mujeres, es completamente distinta. Y mucho más cruda. Como cuando el padre de la niña de Ruiz le informa, al terminar la visita, que no traerá más a la beba porque ya está creciendo y comenzando a entender, y que no quiere que piense "que ver a la madre en prisión es normal". De vuelta, baldazo de agua fría y a despertarse: el festejo ya pasó, se terminó, hora de volver a la realidad.
A diferencia de la estructura habitual de la serie, donde en cada episodio vemos flashbacks de un personaje en particular (a lo Lost), conociendo algo más de su historia previa al encarcelamiento, en este episodio inicial vemos breves flashbacks de varios personajes, todos ellos mostrando la relación con sus respectivas madres. Y aunque cortos en duración (ninguno dura más de un par de minutos) están pensados con gran inteligencia, permitiéndonos conocer algo más de la relación madre-hija/o, confirmando cosas que sospechábamos ("Y claro, eso explica que...") o ratificando otras que ya sabíamos. Desde "Crazy Eyes" hasta Mr. Healy, estas escenas ayudan muchísimo a la construcción de los personajes.
ATENCIÓN: algún que otro SPOILER a continuación
Por el lado de las historias individuales, tenemos por ejemplo que Alex vuelve a la cárcel, luego de ser transferida. Y vuelve algo machucada. En cuanto Piper se entera, no ve la hora de ir corriendo a sus brazos, haciéndose la desentendida de que ella fue -por lo menos en parte- responsable de que Alex esté nuevamente adentro. Presumimos que en algún momento la rubia protagonista va a confesarle ese "pequeño" detalle (acá amaga en decírselo pero termina arrugando) o, lo que sería peor, Alex va a enterarse de alguna manera; sea como sea, es inevitable el conflicto ahí. Ya sabemos que Larry, el ex-novio de Piper, no va a estar presente esta vez; con el regreso de su conflictiva ex-pareja lésbica, el interés amoroso de Piper ya está definido, ¿no? Salvo que aparezca alguien nuevo...
Por lo que vemos, el establecimiento parece marchar mejor bajo la administración de Caputo: se nota que hay un clima más tranquilo y cooperativo; menos mala onda, bah. Aún así, Caputo lo tiene en capilla a Bennett, por haberlo cubierto en aquel temita del embarazo de Daya. Vemos cómo lo hostiga y lo sigue constantemente, recomendándole que tome distancia de la reclusa y se olvide del asunto (la charla entre ambos al respecto es muy divertida). También conocemos a una nueva consejera, Rogers, uque se une a la planta permanente de la Penitenciaría; esto coloca a Healy en una posición algo incómoda, teniendo que compartir su trabajo (justo cuando estaba comenzando a hacerlo correctamente y con un renovado ímpetu) con una mujer de color.
Por el lado de las chicas... "Red", luego de la paliza que recibió de parte de Vee, vuelve al pabellón normal. Comienza a reflexionar y pensar en su futuro, en que "sólo le quedan 2 años" de condena por cumplir. Cuando su marido y sus hijos la visitan, ninguno le quiere confesar que el restaurant se fue a la quiebra (dato que nosotros ya conocíamos). Nos enteramos que "Crazy Eyes" tiene prohibido abandonar el edificio, no pudiendo siquiera salir al patio de la cárcel. También notamos que le cuesta un poquito aceptar que Vee ya no está. Nicky se ve tentada -por lo que entendemos, casi diariamente- a usar la heroína que habían escondido con Boo sobre el cierre de la temporada pasada. Aún así, no tenemos indicios de que realmente haya consumido. "Pennsatucky" es quizás uno de los personajes que más evolucionó desde aquella católica extrema de la primera temporada. No solo vemos afianzada su amistad con Boo (algo impensado al principio), sino que también la vemos lidiar y aceptar sus errores del pasado. Morello fue prácticamente degradada a limpiar los baños, luego de haber "perdido" la camioneta en el último episodio de la 2ª temporada, permitiendo así la fuga de Miss Rosa, la enferma terminal. Ah, y sigue chamuyera como siempre.
Boo parece el payaso de American Horror Story: Freak Show... |
Uno de los mayores méritos -sino el mayor- de OITNB es el impecable balance que consigue en su narrativa. Con uno de los elencos más numerosos de la televisión actual, es extremadamente difícil para los escritores darles su momento a cada personaje. Sí, obviamente siempre queda alguna afuera, pero en episodios como "Mother's Day", casi todas tienen sus 15 seg. de fama por igual. De la misma manera y con idéntica eficacia, la serie mantiene ese equilibrio entre humor (a veces rozando el humor negro), drama, romance, y crítica social.
Según declaraciones de su creadora, y por algunos de los trailers que vimos o hasta la publicidad gráfica (con todo el tema de las velas), sabemos que el tema principal de esta tercera temporada será la fe. Para una serie que se desarrolla casi por completo dentro de una cárcel de mujeres, es todo un tema. Por lo que vimos en este primer episodio, OITNB no va a tener un cambio rotundo, no va a pegar un volantazo y desviarse de su sendero original porque sí. Y está perfecto. Ya conocemos a estas mujeres: ya simpatizamos con ellas -hasta con las que al principio creíamos que jamás ocurriría tal cosa-, conocemos su pasado en líneas generales. Ahora queremos conocer su futuro. Porque ser madre también se trata de eso, ¿no? De afrontar el futuro con renovada fe y esperanza. De no solo ver "la luz al final del túnel", como dice Red; sino también de caminar hacia ella sin miedo ni titubeos.
La 13 episodios que componen la nueva temporada de OITNB ya están disponibles para ver. En cuanto los liquidemos, les traemos la review completa. Mientras tanto, sigan leyendo La Cuarta Pared.
0 comentarios:
Publicar un comentario