Louis C.K. es, para quienes no lo conocen, un apenas simpático pelado pelirrojo, gordo, pasados los 40, divorciado y con dos hijas, que se gana la vida con shows de comedia stand-up (esa disciplina que nosotros tocamos apenas de oído y que el país del Norte viene cultivando con éxito desde años, desde Seinfield para la pantalla chica o The Kings of Comedy para la grande).
Al margen del stand-up (pueden encontrar algunos de sus shows en vivo vía Netflix), en el 2010 a Louie se le dio por hacer una serie. Una serie que, afortunadamente, Comedy Central Latinoamérica estrenará hoy Martes 15 de Noviembre a la medianoche.
La serie cruza momentos de su show en vivo, con escenas de lo que sería la vida de este comediante fuera del escenario. Lo primero que me vino a la mente después de ver los primeros 13 episodios que conforman la temporada inicial fue el chiste el Pagliacci que cuenta Rorschach en Watchmen: no siempre los que nos hacen reír son los más felices.
Louie se presenta como una suerte de "Bukowsky light". El tipo es un perdedor en la vida diaria, no es un galán, no es particularmente famoso, es gordo, pelado y "viejo", pero se lo toma con humor (cuando puede). La lucha por ponerla es igual a la de nosotros, el resto de los mortales. Pero ponerla no es nada fácil cuando suscribís a los adjetivos anteriormente descritos, por lo que realmente es una lucha que, la mayoría de veces, termina en fracaso. De hecho, a veces hasta lo lograría pero (como nos pasa, pasó y pasará a muchos), nos damos cuenta demasiado tarde y... ¡zas!, la oportunidad ya pasó. Pero, como en la vida misma, si bien nuestro afán de ponerla es primordial, a Louie también le pasan otras cosas.
El programa es realmente muy, muy bueno pero no es fácil de ver: podríamos decir que Louie es un drama disfrazado de comedia. No es adictivo porque no apunta a ver qué pasa el próximo episodio con la formulita de "dejarte con ganas", no juega con el espectador y, de hecho, muchas veces no le da lo que quiere. Louie es Louie, y en momentos donde debería salir ese hombre que todos pensamos que tenemos dentro, no sale. Es un cobarde que intenta hacer lo correcto pero finalmente hace lo que puede, lo que está a su alcance. El programa piloto es probablemente el más flojo de todos; me sorprende que haya logrado vender la serie con eso. Es el más irreal, con una situación imposible y un conductor de micro escolar que sale de contexto dentro de cualquier contexto (valga la redundancia), forzado y flojo en todo sentido. Pero sacando ese episodio (que igual se deja ver), el resto de la temporada es genial: algunos episodios son mucho mejores que otros, algunos cuentan con mayor presencia del stand-up, mientras que otros son más llevados hacia otra historia y otros países.
Por otro lado, el hecho que cada episodio no dependa de lo ocurrido en el anterior para poder verlo y entenderlo, es algo de vital importancia para todos aquellos que no soportan el frenetismo histérico de "tener que ver sí o sí" el siguiente capítulo y no poder saltearse uno por miedo a perderse algo importantísimo de la trama (que igual te van a explicar, así que no te perdés de nada).
Por otro lado, el hecho que cada episodio no dependa de lo ocurrido en el anterior para poder verlo y entenderlo, es algo de vital importancia para todos aquellos que no soportan el frenetismo histérico de "tener que ver sí o sí" el siguiente capítulo y no poder saltearse uno por miedo a perderse algo importantísimo de la trama (que igual te van a explicar, así que no te perdés de nada).
Historias como la del reencuentro con su amigo y casi mentor como comediante, ahora venido a menos (sí, aún más que él) y con un pujante deseo de suicidio, constituyen episodios duros de presenciar pero entrañables, porque ya sabemos que Louie no es ningún héroe. O el intento por revivir su juventud, yendo a boliches a "vivir la vida", todo porque su niñera le pide (llorando) que salga y se divierta. Otro gran episodio es el que comparte pantalla con Mathew Broderick, quien se interpreta a sí mismo.
En definitiva, si son de los que jamás vieron Louie, Comedy Central Latinoamerica les ofrece una oportunidad inmejorable de conocer a este gran comediante de la TV norteamericana, que cuenta en su haber con tres premios Emmy, un Grammy, y más de 30 nominaciones. Todo comienza hoy, Martes 15 de Noviembre, a las 00 hs. con un episodio doble (Arg), y sigue el Jueves 17 a las 21 hs. (Méx) y 22 hs. (Col).
Para los que ya lo conocen, no hace falta mayor presentación que esta reseña y saben que el tipo es un realmente bueno en lo que hace. Y para los que aún no lo conocen o nunca se animaron a hacerlo, este clip junto a Conan O'Brien no tiene desperdicio, ofreciéndoles un buen indicio de la genialidad que les espera a partir de hoy.
VEREDICTO: 9.0 - ¡EN TU CARA, SEINFELD!
Lo más notable de esta serie es que el capo Louis C.K. hace todo: la actúa, la dirige, la edita, la produce; sólo falta que le agarre "la gran Eddie Murphy" y se ponga a interpretar a todos los personajes. Pero a pesar de este acto de total egocentrismo, Louie es muy buena. Sí, te incomoda, pero como te incomodan aquellas cosas que se hacen bien. Te genera empatía y te da vergüenza ajena. Y lo más importante: te hace reír, reflexionar, y hasta pasarla un poco mal.
Lo más notable de esta serie es que el capo Louis C.K. hace todo: la actúa, la dirige, la edita, la produce; sólo falta que le agarre "la gran Eddie Murphy" y se ponga a interpretar a todos los personajes. Pero a pesar de este acto de total egocentrismo, Louie es muy buena. Sí, te incomoda, pero como te incomodan aquellas cosas que se hacen bien. Te genera empatía y te da vergüenza ajena. Y lo más importante: te hace reír, reflexionar, y hasta pasarla un poco mal.
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