Si viste Dragon, aquella película de 1993 protagonizada por Jason Scott Lee que narraba las desventuras de Bruce Lee en Hollywood, tal vez conozcas esta historia: allá por 1971, el astro de las artes marciales tuvo la idea de llevar a cabo una serie llamada The Warrior, en la que el mismo Bruce protagonizaría a un artista marcial y su viaje a través del Viejo Oeste, pateando los traseros de todos los malhechores con los que se cruzaba.
Pero en aquel entonces los estudios le bajaron el pulgar al proyecto, ya que no podían imaginar un show protagonizado por un asiático. Misteriosamente, al año siguiente, Warner Bros. estrenaba una serie llamada Kung Fu, protagonizada por un bastante desconocido David Carradine (whitewashing active!) como Kwai Chang Caine, un monje shaolin pseudo-asiático que recorría el Viejo Oeste. A pesar del más que dudoso parecido (por no decir "choreo"), el estudio negó que tuviera algo que ver con el concepto que había desarrollado Lee.
Casi 50 años después, el director Justin Lin (Better Luck Tomorrow, la franquicia Fast & Furious) recuerda que tenía 8 años cuando vio a Kung Fu por primera vez, sin poder entender por qué Carradine estaba en el papel.
Estaba confundido. No sabía por qué hablaba en un inglés tan forzado.
Cuando se enteró de que Lee originalmente tenía una idea como Kung Fu, Lin supo que tenía que llevarla a la pantalla y hacerlo con un elenco que le haga honor a su historia. El realizador se asoció entonces con la hija de Bruce, Shannon Lee, quien "trajo ocho páginas de las notas originales de Bruce", dice, y entre ambos trasladaron esas páginas a la pantalla.
El resultado es la nueva serie de Cinemax, Warrior, un drama que hará su debut el próximo 5 de abril. El programa es protagonizado por Andrew Koji (The Innocents) como un prodigio de artes marciales que viaja de China a San Francisco a finales de 1800 en una misión, solo para enredarse en las brutales guerras del Clan Tong de Chinatown.
Hacer que Warrior se hiciera realidad no fue fácil. De hecho, admite Lin en una charla exclusiva con Entertainment Weekly, encontrar un protagonista asiático y completar el elenco con actores como Jason Tobin (Better Luck Tomorrow) y Olivia Cheng (Arrow) fue una movida difícil de llevar adelante:
Para nosotros era importante encontrar un director de casting que realmente estuviera abierto a nosotros yendo por todo el mundo [para la búsqueda]. Tomó un tiempo ... creo que no quedaron piedras sin remover, y creo que esa es la manera correcta [de hacerlo].
Si tienen miedo que la serie se sienta "anticuada", teniendo en cuenta que el concepto original fue desarrollado hace cinco décadas, Lin sale rápido a aclarar que ciertos aspectos fueron obligadamente modificados para que la historia resuene con la audiencia moderna, pero manteniendo la esencia de sus personajes y los temas abarcados.
Hubo muchos cambios en el ritmo de la narración, en cómo íbamos a explorar ciertos temas. Intentamos honrar lo que él estaba haciendo, pero al mismo tiempo, el cine, la TV y la narrativa realmente han evolucionado.
Mientras tanto, Lin no para de trabajar, ya que tiene programado volver para las próximas entregas en la franquicia Rápido y Furioso, y se informa que está avanzando con Space Jam 2 [N. del E.: Yes!!]. Sin contar con que tiene un acuerdo general con Apple para desarrollar series de TV. A pesar de todos estos proyectos, para él, Warrior significa más que solo concretar otro proyecto desde cero.
He tenido la suerte de poder intentarlo todo. Pero tengo que decir que Warrior ha sido mi orgullo y alegría.
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| "You must defeat my Dragon Punch to stand a chance!" |
Basada en un proyectado inconcluso de Bruce Lee o no, Warrior definitivamente ya tiene nuestra atención. En especial luego de lo que fueron los bodrios mano a mano de Iron Fist.
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