Crónicas de la CCXP18 - Día 1

Este año me di el lujo de viajar a São Paulo, Brasil, para asistir a los cuatro días de la Comic Con Experience 2018 (alias CCXP18), un evento fascinante que arrasó con todas mis expectativas. Esta serie de notas es una suerte de diario de viaje, con todo lo vivido en los paneles e imágenes exclusivas tomadas por este humilde servidor (clickeen sobre ellas para ampliarlas).

Ojalá sirva para que la experiencia resulte un poco más cercana.

Jueves 6 de diciembre - Día 1

Como todo comienzo desde el parto en adelante, arrancamos complicados. La acreditación de Prensa se había demorado por una desinteligencia de mi parte con la gente de Cinemark Brasil, así que, antes de esperar con los brazos en jarra, opté por ingresar como un mortal más con el pase que ya tenía.

El primer gran panel era el Chris Columbus, director de Home Alone, las dos primeras de Harry Potter, Mrs. Doubtifre, y tantas otras. Columbus prácticamente te servía el desayuno de lo temprano que estaba: tan solo 30 min. después de abiertas las puertas al público, por lo cual -salvo que tuvieras el pase Full Access- era prácticamente imposible llegar si no estabas entre los primeros de la fila, así que no sé cuánta gente lo habrá visto realmente. Cuando ingresamos, su panel ya había terminado. Pero lo vimos hablando afuera, en una suerte de estudio de TV a la vista, en un hexágono vidriado al cual iban todos los invitados luego de pasar por el Auditorio Cinemark XD (donde se efectuaban las grandes presentaciones).

Decidí aprovechar el tiempo "libre" que me quedó para recorrer un poco los stands y ver qué era todo lo que había (al finalizar la jornada me di cuenta que solo había recorrido la mitad del predio, pero esa es otra historia...). El problema era que en varios de ellos había que pre-inscribirse online, con día y horario, y la mayoría ya tenían los turnos agotados. Particularmente interesante era el stand de Warner Bros. Pictures, con Aquaman (que incluía una estatua de Arthur y otra de Mera), Godzilla: King of the Monsters, Shazam! y Creed II. El sector de Shazam! te hacía subir a un escenario y gritar (adivinen qué) ante el rayo gigante del logo del superhéroe, que se iba llenando de acuerdo a la intensidad del grito. Pero cuando fuimos nosotros, lo estaban arreglando porque no funcionaba bien. Del otro lado, la actividad de Creed II permitía subir a dos participantes al cuadrilátero (cada uno con una bata, de Creed o Drago, y los guantes de box correspondientes) y participar de una trivia; el ganador se llevaba una remera exclusiva y una bolsa con cositas.

 

Casi detrás se encontraba el stand de Sony Pictures, con un vistazo exclusivo a los trajes originales que usará Tom Holland en Spider-Man: Far from Home (¿se habrán reservado alguno?), así como los utilizados por el Agente H (Chris Hemsworth) y la Agente M (Tessa Thompson) en la nueva Men in Black: International, cuyo nombre oficial fue confirmado justamente acá en la convención.

 

Entonces me percaté de la hora y me di cuenta que ya había comenzado el panel de American Gods (la adaptación televisiva del best-seller de Neil Gaiman y una de mis series favoritas del 2016), con la presencia de su protagonista, Ricky Whittle (Shadow Moon), en vivo sobre el escenario. Me interesaba no solo la posibilidad de un nuevo avance de la segunda temporada, sino también la chance de escucharlo a Whittle hablando un poco sobre las numerosas dificultades que debió atravesar la producción este año, como la partida del showrunner original, reescrituras del guión, demoras en el rodaje de los últimos episodios, y un supuesto "clima tenso" en el set. Todo esto para decir que sí, me lo perdí. Pero estaba comenzando a aprender cómo venía la mano y fui directo al cruce del actor en el hexágono post-auditorio.

El Ricky de la gente.

Nuevamente con algo de tiempo libre, decidí seguir con la recorrida. Frente al sector arácnido se alzaba el stand el enorme stand de Disney, que por supuesto incluía sectores dedicados a Marvel Studios, Pixar, Lucasfilm, y Buena Vista International. Por el lado de Walt Disney Studios, podíamos sacarnos una foto con una réplica de Dumbo (versión live-action de Tim Burton) en escala real o con la lámpara de Aladdin. En el rincón de Marvel lo más interesante era la presencia del traje original que usará Brie Larson en Captain Marvel y que podíamos sacarnos una foto "con el avión".

El booth de Netflix también se erguía imponente con la presencia de sus nuevas producciones (Bird Box, The Umbrella Academy, Mowgli, Caballeros del Zodíaco) y otras ya estrenadas pero exitosas (Stranger Things, The Chilling Adventures of Sabrina). Como no podía ser de otra manera, La Casa de Papel tenía un sector enorme exclusivo, en el cual podías participar ingresando y formando parte del robo.

A veces sale bien, a veces sale mal.

Dark Phoenix y Alita Battle Angel se veían debidamente representadas en el stand de 20th Century Fox. El sector de Alita permitía subir a una plataforma, donde capturaban nuestra reacción frente a un supuesto ataque por parte de los cyborgs y lo convertían en un gif animado que nos enviaban por mail.

La mansión del pelado Xavier.

Llegamos así hasta el Artist's Alley, el espacio dedicado a los numerosos ilustradores y guionistas invitados, cada uno en su sector firmando autógrafos y saludando a sus fans. Como buen fan cholulo, me había llevado un par de hardcovers para conseguir las firmas de John Romita Jr. (The Man Without Fear, The Amazing Spider-Man, All-Star Batman) y John Cassaday (Planetary, Astonishing X-Men, Captain America).

De ahí salí raudo y veloz para ingresar al panel de Game of Thrones, con las presencias en el escenario de Maisie Williams (Arya Stark), John Bradley (Samwell Tarly), y la dupla de showrunners/guionistas David Benioff y D.B. Weiss. Oh, qué iluso. Ese fue el momento donde me di cuenta que estaba subestimando la cantidad de público en los paneles y, aún con una hora de anticipación, la fila para ingresar al auditorio daba una y otra y otra y otra vuelta (recuerden que el jueves todavía no estaba debidamente acreditado como Prensa, sino hubiera accedido de manera directa). No obstante, me quedé en la fila y recordé que tenía en la mochila dos sandwichs sin comer (Dios bendiga los desayunos de los hoteles brasileros). La enorme pantalla ubicada fuera del auditorio permitía ver a los invitados y saber qué estaban hablando; así fue como me enteré que hubo un grupo de violinistas tocando la melodía del opening en vivo.

Algo para mencionar y destacar es que, en el auditorio, todo el mundo está sentado en su silla, nadie está de pie; esto significa que tienen los lugares disponibles perfectamente contados y que, si se retiran tres personas, ingresan otras tres. De esta manera, la fila constantemente está avanzando, aunque sea a paso lento. Aún así no fue suficiente para que logre ingresar a tiempo (les dije que había sido un día complicado) y quedé tan solo a unos metros del acceso, como cuando estás 20 minutos haciendo la cola para el cajero del banco y se jode cuando solo te faltan dos personas. Pero poco antes de que finalice el panel, se oyó un terrible griterío y la pantalla dejó de transmitir lo que ocurría dentro, tras lo cual se oyó otro terrible griterío y aplausos unos segundos después: era evidente que habían pasado material inédito. De inmediato lo mensajeé a Marcos Ramón para que chequee las redes sociales de HBO, por si habían publicado algo. Y no me había equivocado: casi en simultáneo con la CCXP, el canal de YouTube de HBO había publicado el teaser trailer que vimos todos. Respiré aliviado cuando Marcos me confirmó que el teaser no mostraba nada.

Oh, bueno. Por lo menos pudimos ver a Arya y Sam a la salida.

Aprovechando que estaba casi adelante de todo en la fila, ingresé para el último panel importante del día, dedicado a Mortal Engines, el nuevo film de Universal Pictures producido por Peter Jackson (The Lord of the Rings, King Kong). Antes de comenzar, repartieron entre todos los presentes un pañuelo bordó/colorado como el que usa la protagonista, con el logo impreso, y nos pidieron que lo usemos para comenzar la presentación. Jackson y el director Christian Rivers aparecieron entonces en las pantallas, transmitiendo en vivo desde quién-sabe-dónde, para responder las preguntas del anfitrión del evento y mostrar un clip exclusivo que duró unos 15 minutos aproximadamente.

La escena claramente transcurría cerca del inicio del film, mostrando una persecución entre ciudades. Por más absurdo que sea el concepto de grandes ciudades ambulantes motorizadas "deglutiendo" a ciudades más pequeñas, lo cierto es que visualmente resulta muy interesante; imaginen algo como Howl's Moving Castle, de Studio Ghibli, pero con un aire más steampunk y toda máquina. En el clip pudimos ver cómo Londres perseguía y absorbía a la diminuta ciudad minera de Salzhaken, en una relación de escala que era similar a la de un tanque Panzer persiguiendo a un karting. Algo de eso ya se había visto en el trailer, por lo que el material se extendía mostrando en detalle a varios de sus personajes y cómo funciona esta nueva sociedad que va adoptando diversas culturas y mantiene museos de "vieja tecnología" (con un inesperado y muy divertido guiño a una de las franquicias más exitosas de Universal). Finalizado el clip, Jackson y Rivers volvieron a aparecer para seguir respondiendo preguntas, contar algo del proceso de adaptación de los libros originales de Phillip Reeve y cruzar los dedos esperando que esto se convierta, obviamente, en otra trilogía cinematográfica.

Jackson y Rivers en plena venta.

Por las noticias que llegaron hoy tras su estreno el viernes pasado en USA, parece que ambos se quedarán con las ganas: la película debutó con críticas bastante adversas (por no decir que la prensa la mató) y una performance en la taquilla muuuuy por debajo de las expectativas. Veremos cómo le va cuando se estrene en el resto delmundo, pero ya había algunas notas en portales del espectáculo augurando que podía convertirse en el mayor fracaso comercial del año, con pérdidas de casi 100 millones de dólares para el estudio.

Por lo menos me traje un par de servilletas pañuelitos.

Los dos que estaban atrás mío se avivaron de la foto.

A la salida del panel, con algo de tiempo aún antes que nos echen, hicimos otra recorrida rápida. Pasamos por el stand de Iron Studios, la compañía brasilera de estatuas y figuras Premium. Como siempre, los brasileros la rompen. Esta vez había una réplica en escala real de los raptores en la cocina de Jurassic Park, recreada a la perfección (¡estaba hasta el cucharón tirado en el piso!) para que nos saquemos una hermosa foto. En la parte lateral y trasera del stand se disponían estatuas (también en escala 1:1) de Gandalf, los Nazgûl, Luke Skywalker (versión The Last Jedi) y Thanos, que no sé si sería exactamente 1:1 (perdón, pero no sé cuánto mide Thanos supuestamente) pero aún así era bastante grande.

También había una suerte de galería de arte dedicada exclusivamente a Alex Ross (Kingom Come, Marvels), con numerosas obras originales enmarcadas como verdaderas piezas de arte (¡que lo son, carajo!). Uno conoce ya hace décadas el trabajo de Ross, pero creánme que verlas in situ, apreciar cada detalle con sus propios ojos, es algo increíble. Todas las obras estaban a la venta, pero preferí no amargarme así que ni miré los precios.

Por el amor de Odín, esos colores.

De ahí nos fuimos hasta la otra punta del predio, pasando el Artist's Alley, y descubrimos que existía toooodo un sector que ni habíamos llegado a ver. Pero decidimos dejarlo para el segundo día.  Hasta el Crocodile Bar de American Gods estaba apagando las luces.

Evidentemente esto recién comenzaba...

(Para la galería completa de imágenes, clickeen acá: http://bit.ly/2rG02S3)