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la cuarta pared

viernes, 19 de octubre de 2018

Review: LA MALDICIÓN DE HILL HOUSE


By on 3:50 p.m.



Ya conocemos la historia. La hemos visto muchas veces en cine y televisión: una familia que se muda a una casa poseída por entes sobrenaturales, que los acechan hasta el borde de la locura y la muerte (por lo general de algún personaje secundario). El conflicto se resuelve, la familia sobrevive y se marcha del lugar maldito. La hemos visto en House, Terror en Amityville, El Conjuro y tantas otras. En esas historias nunca vemos qué pasa con la vida de esas familias luego de vivir una experiencia tan traumática. Y es aquí donde la nueva producción original de Netflix, La Maldición de Hill House, da una vuelta de tuerca para contarnos una historia que ya conocemos muy bien pero de una manera totalmente novedosa.

Basada muy libremente en la novela homónima de Shirley Jackson publicada en 1959, The Haunting of Hill House comienza a finales de 1992 cuando la familia Crain, compuesta por Hugh (Henry Thomas, a quien todos conocimos como Elliott ¡el niño de E.T.!), su esposa Olivia (Carla Gugino, de Watchmen) y sus cinco hijos, Steven (Paxton Singleton), Shirley (Lulu Wilson, Ouija: El Origen del Mal), Theo (Mckenna Grace, próximamente en Annabelle 3), y los pequeños Luke (Julian Hilliard) y Nell (Violet McGraw), se instalan en una antigua mansión para restaurarla y venderla al mejor postor. Pronto comenzarán a vivir terroríficos sucesos paranormales dentro de Hill House, que los perseguirán y marcarán para el resto de sus vidas.

Es aquí donde la narración se parte en decenas de pedazos, y nos trasladará hacia el futuro donde los chicos han crecido pero no han podido dejar atrás los sucesos vividos en la mansión. Una tragedia los unirá nuevamente para enfrentar los fantasmas de su pasado, pero no solo aquellos paranormales, sino tal vez los más peligrosos: los fantasmas propios de cada uno.

Una noche de mierda: algo muy, muy malo les pasó a los Crane. 

Los diez episodios, de casi una hora de duración cada uno, navegan constantemente entre estas dos franjas temporales, mostrándonos la vida de los personajes, tanto en su infancia como en su adultez, en forma paralela, contándonos un terrible suceso en particular y de qué manera lo vivió cada uno de ellos. Esta estructura narrativa nos recuerda, por un lado, a la noventosa versión televisiva de IT, de Stephen King; y por el otro al drama This is Us, solo que en lugar de estar al borde del llanto emotivo como ocurre con la serie protagonizada por Milo Ventimiglia, estás al borde de que te un susto (o un bobazo todo tiempo). Cada entrega nos ayudará así a resolver el rompecabezas de lo que pasó en la llamada "Última Noche" (y sí, lo que pasa da mucho miedo).

El gran orquestador de esta historia es Mike Flanagan (Ouija: Origin of Evil, Oculus, y próximamente Doctor Sleep, la secuela de The Shining), quien dirige todos los episodios de manera sublime. Además del apartado visual y su excelente fotografía, Flanagan (encargado de escribir la adaptación) dota a la historia de una fuerte carga emotiva, intensa, pero sobre todo angustiante; ver las cosas por las que pasan los chicos, sobre todo los más pequeños de la familia, Luke y Nell, y las consecuencias en su vida adulta, resultan desgarradoras.

¡La recon*** de la lora! 

Los momentos de puro terror resultan difíciles de sacártelos de la mente, sobre todo cuando Luke baja al sótano de la mansión, o el misterio entorno a la habitación roja, o la subtrama de La Señora con el cuello torcido, con una resolución realmente escalofriante.

No obstante, el gran momento de la serie llega en el espectacular y aterrador capítulo 6, titulado "Dos Tormentas", el cual está filmado y construido a través de seis planos secuencias (sin cortes) de diez minutos cada uno, en los cuales pasa absolutamente de todo. Una verdadera joya, que lo sitúa como lo mejor que vimos en este 2018.

Por último, hay que destacar el brillante trabajo del casting, tanto del elenco adulto como del infantil, y no solo por el parecido físico entre ellos sino por su enorme desempeño actoral: Michiel Huisman (Game Of Thrones) como Steven, Elizabeth Reaser (Twilight) como Shirley, Kate Siegel (Oculus) como Theodora, Victoria Pedretti (Nell) y Oliver Jackson-Cohen (Emerald City), quien tal vez sea el más "roto" de los hermanos (y no es para menos con todo lo que le enfrentó) en el papel de Luke.

No se pierdan el sexto capítulo, una joya visual. 

La Maldición de Hill House es otra gran apuesta de Netflix, de la cual sale rotundamente ganadora. La adaptación de Mike Flanagan es un relato aterrador y reflexivo acerca de nuestros propios demonios (o fantasmas, en este caso), que, a pesar de dejarnos sin aliento al finalizar cada episodio, termina siendo esperanzador. Una verdadera obra maestra que trasciende su género y que se coloca inmediatamente entre lo mejor del año.



VEREDICTO:  10 - THIS IS US HORROR SHOW

Sin lugar a dudas, La Maldición de Hill House es mi serie favorita en lo que va del 2018. Aterradora, desgarradora, cada episodio se desarrolla con tanta intensidad que te deja una fuerte sensación de angustia. Tranquilamente podría ser una superproducción de Hollywood, pero por suerte la podemos ver en la comodidad de nuestros hogares (los cuales, ruego, no estén embrujados). Los comentarios son acertados: Mike Flanagan logró la serie de terror definitiva. Véanla de noche, completamente a oscuras y con el volumen bien alto; les garantizo que les va a poner la piel de gallina.


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