La secuencia inicial esta perfectamente planificada y armada. No importa, porque ésta será la premisa de un espectáculo que se ejecuta de forma perfecta (aunque tengo que admitir, sin margen para la espontaneidad).
Justin Timberlake llega al teatro horas antes de comenzar los últimos dos shows de una extensa gira mundial que comenzó en 2014. Primero es el equipo de bailarines y músicos quienes hacen su presentación. Se muestran como una unidad, una familia. Todos están tranquilos, han hecho esto ciento de veces. JT se reúne con su equipo, forman un circulo y lo deja bien claro:
Miren a su derecha y a su izquierda. Eso es lo que importa, este show lo hacemos para nosotros.
La cámara se queda con Timberlake, el príncipe del pop. No está ansioso ya que todo se encuentra, como bien dije al comienzo, planificado y armado. Una especie de ascensor lo pone en el escenario, donde comenzará con un solo de "Pusher Love Girl". Luego surgirá la banda para mostrarnos a todo el equipo juntos. Esta película es sobre ellos, y es por eso que nos olvidamos que hay miles de personas observando hasta casi finalizar el primer tema...
Filmado en Enero de este año, en el mítico MGM Grand Garden Arena de Las Vegas, y bajo la dirección del ganador del Oscar, Jonathan Demme (The Silence of the Lambs), Netflix nos trae la gira mundial de Justin Timberlake + The Tennessee Kids, un show de casi una hora y media, donde el artista americano interpreta con soberbia los mejores hits de su carrera.
Justin navega a través de los temas de sus cuatro discos: Justified (2002), FutureSex/LoveSounds (2006) y The 20/20 Experience (un disco dividido en dos partes, lanzadas en 2013). Nada está fuera de lugar, no erra ni un paso, todo sale de memoria.
Hablamos de un espectáculo único, donde la puesta en escena (juego de luces, una plataforma que se desplaza a lo largo de la platea y una pantalla en forma de colmena) se fusiona con las canciones y coreografías. Y estos elementos son esenciales para trasmitir la pulcritud del show a través de la cámara.
Hablamos de un espectáculo único, donde la puesta en escena (juego de luces, una plataforma que se desplaza a lo largo de la platea y una pantalla en forma de colmena) se fusiona con las canciones y coreografías. Y estos elementos son esenciales para trasmitir la pulcritud del show a través de la cámara.
No sólo Los Auténticos Decadentes roban con 200 músicos en el escenario, |
No obstante, tal vez esa pulcritud y excelencia que vemos en escena es lo que le resta calidez al show. Y no sólo porque el director decide enfocarse en Timberlake y su equipo (esto es lo que transmite el show y no sólo la película), sino porque no hay cercanía con el público, al cual vemos poco en pantalla. Al estar todo tan armado, no hay lugar para salirse del guión. Claros ejemplos de esto es cuando JT se "encuentra" en el público con Timbaland (a.k.a Timothy Mosley), su colaborador más importante en la composición y producción de canciones desde 2006. No nos creemos nada esa "sorpresa" y menos cuando le convida un shot de tequila (vaya casualidad de Timberlake es dueño de una marca de esta bebida, 901).
Tampoco le creemos mucho la emoción del final, pero puede ser valida por ser el final de una gira que le llevo dos años completar. El cierre es bien arriba con una tremenda performance de "Mirrors", donde finalmente el público termina formando parte del todo.
Tampoco le creemos mucho la emoción del final, pero puede ser valida por ser el final de una gira que le llevo dos años completar. El cierre es bien arriba con una tremenda performance de "Mirrors", donde finalmente el público termina formando parte del todo.
Si sos de los que prefiere saberlo de antemano, este es el playlist completo:
- Pusher Love Girl
- Gimme what I don't know (I want)
- Rock your body
- Don't hold the wall
- FutureSex / LoveSounds
- Like I love you
- My love
- Lovestoned
- Until the end of time
- Holy grail
- Only when I walk away
- Drink you away
- Let the groove get in
- Shining star
- Human nature
- What goes around
- Poison
- Suit and tie
- SexyBack
- Mirrors
Esto no lo hace Marama... |
Bancamos mucho a Justin Timberlake (la verdad es que canta bien y es noble), y no sólo por meter hits que nos hacen bailar, o por habernos metido en el bolsillo como Sean Parker en The Social Network, sino también porque se come a Jessica Biel. Y eso es muy importante.
Tanto para los que siguen al cantante como para aquellos que piensan que es simplemente un ex-N*Sync, esta película es una buena oportunidad para ver el nivel de detalle que tiene un show de primer nivel (cuyo ticket tiene un costo de unos U$S 400). Te pueden gustar o no sus canciones, pero cuando veas Justin Timberlake + The Tennessee Kids te vas a quedar pensando... ¿cómo lo hacen?
Y en definitiva, no importa. Porque lo hacen excelente.
Y en definitiva, no importa. Porque lo hacen excelente.
0 comentarios:
Publicar un comentario