THE FLASH y los dos finales que quedaron perdidos en el camino

El Hombre Más Rápido del Mundo corre más rápido en círculos.

Mientras The Flash lamentablemente pierde velocidad y apenas logra recaudar US$55,1 millones en la taquilla norteamericana en su fin de semana de estreno (muy por debajo de los US$70-75 millones que anticipaba Warner Bros.), The Hollywood Reporter publicó un nuevo informe donde ratifica aquellos rumores y fotos que circularon hace vaaarios meses, confirmando dos versiones distintas del final que efectivamente terminó llegando a los cines.

Según cuenta el sitio, el final actual es "el tercer final que se elaboró para la película, que el director Andy Muschietti realizó durante tres regímenes distintos en Warner Bros.", lo que de alguna manera convierte a The Flash en "un estudio de una película que sobrevivió y evolucionó en un panorama mediático en rápida transformación, enfrentándose a los dictados de varios grupos de jefes de estudio y a una adquisición multimillonaria".

THR explica que el film de Muschietti "comenzó su andadura bajo el régimen del estudio dirigido por Toby Emmerich y su lugarteniente, el jefe de DC Films Walter Hamada. La mayor parte del rodaje y la posproducción se llevaron a cabo bajo esa dirección, y la película formaba parte del plan de Hamada para que 'The Flash' se convirtiera en un reboot de todo el universo cinematográfico de DC, apartándose del establecido por Zack Snyder en 'Man of Steel' hace una década. Hamada planeó una secuela de 'The Flash' y luego quería pasar a una película inspirada en el clásico cómic de 1985, 'Crisis on Infinite Earths'".

A continuación, THR afirma que "tal como se concibió y rodó originalmente, la película terminaba en la escalinata del juzgado con Supergirl, interpretada por Sasha Calle, y Batman, interpretado por Michael Keaton". De hecho, si recuerdan (o googlean) las primeras imágenes filtradas desde el set, efectivamente se lo veía a Keaton (como Bruce Wayne) arribando a los tribunales en un lujoso automóvil, y a Supergirl sobrevolando el área.

De esta manera, continúa THR, "se pretendía destacar que Barry no reinició la línea temporal como él creía. Fue un final que se testeó varias veces y que invertía las muertes de Supergirl y Batman antes en la película".

Sin embargo, como bien sabrán, The Flash quedó atrapada en el torbellino de la adquisición de Warner Bros. por parte de Discovery en 2022. Emmerich y Hamada fueron destituidos de sus cargos, y el nuevo CEO de Warner Bros. Discovery, David Zaslav, se puso en busca de un nuevo ejecutivo para dirigir la división. Mientras tanto, Michael De Luca y Pamela Abdy fueron nombrados presidentes y consejeros delegados del Warner Bros. Pictures Group. A ambos se les encomendó la tarea de supervisar DC mientras tanto y, de repente y no por casualidad, tenían sus propios planes.

Fue entonces cuando se concibió un otro final para The Flash. Esta nueva versión continuaba en las escaleras del juzgado, pero ahora a Supergirl y Batman Sasha se les unían Superman, personificado por Henry Cavill, y Wonder Woman, interpretada por Gal Gadot.

Según THR, "De Luca y Abdy creían que estaban siendo estratégicos con el final". Cavill ya había acordado hacer un cameo en Black Adam, y aún se barajaba la posibilidad de que retomara el papel en una secuela del Hombre de Acero. Supergirl fue retenida porque, "aunque los ejecutivos estaban cancelando el desarrollo de una película independiente del personaje, estaban abiertos a su regreso de alguna forma y no querían que la última imagen que el público viera de ella fuera su muerte a manos de un supervillano" (en referencia al General Zod de Michael Shannon).

A todo esto, el estudio seguía desarrollando una tercera entrega de Wonder Woman con Gadot y la directora Patty Jenkins. Era una buena forma de mantener a Wonder Woman "en la conversación cultural". Este nuevo final con la participación de Miller, Cavill, Gadot, Keaton y Calle se rodó en septiembre. De vuelta, si googlean las imágenes filtradas desde el set, se veían publicidades con Gal Gadot como WW en las cercanías del tribunal.

Pero entonces el tablero volvió a cambiar por completo. El pasado mes de noviembre, Zaslav anunció que el escritor/director James Gunn (Guardians of the Galaxy, Peacemaker) y el productor Peter Safran (Shazam!, la saga de El Conjuro) iban a co-dirigir el rebautizado DC Studios, supervisando todos las producciones cinematográficas y televisivas, sean live-action o animadas, de DC. Y de repente, y no por casualidad, ellos también tenían sus propios planes.

Asumiendo la responsabilidad de trazar el rumbo de lo que sería un renovado Universo DC bajo su propia visión, Gunn y Safran consideraron que continuar con Cavill y Gadot era -según THR- "potencialmente prometer algo que sus planes no iban a cumplir". Por ello, una de las primeras medidas que tomó la nueva gestión fue pedirle a Cavill que devuelva la capa roja bien planchadita (a pocas semanas de anunciar con bombos y platillos que volvía a personificar al héroe), y agradecerle por sus servicios a Jenkins, prácticamente cancelando así la tercera entrega de Wonder Woman. O por lo menos esa versión del proyecto.

Los cineastas, según varias fuentes cercanas a la producción, "buscaron entonces alternativas, pero querían mantener el germen de la idea: Barry Allen cree que todo va bien, pero en el último momento le tiran de la manta". También retomaron una idea sobre la que se había bromeado al inicio del rodaje: "¿Cuántos Hombres Murciélago podemos tener?". Fue entonces cuando se mencionó a George Clooney, protagonista de la infame Batman and Robin de 1997, como una posibilidad remota; Gunn y Safran aceptaron la idea.

El dúo no-tan-dinámico se puso en contacto con el agente de Clooney en CAA, Bryan Lourd, y le mostraron un corte de la película casi terminada. A Lourd le gustó y se lo enseñó a Clooney. Al actor también le gustó y aceptó participar.

THR cuenta que rápidamente se organizó el rodaje del tercer -y ahora definitivo- final y, una mañana de enero, Clooney estaba allí de regreso como Bruce Wayne, por primera vez en 26 años. También estaba presente Ezra Miller, haciendo su primera aparición en el set "desde el fatídico día de agosto en el que se reunió con De Luca y Abdy para hablar de su controvertido comportamiento (incluidas múltiples detenciones) y de los pasos a seguir".

Miller estaba en plena forma ese día, dicen las fuentes, para lo que se describió como "un rodaje rápido y eficiente". Clooney y Miller pasaron algún tiempo juntos charlando entre toma y toma, con el veterano actor "dándole consejos alentadores sobre el manejo de estar en el centro de atención y cómo comportarse en público".

Según sentencia un insider que habló con THR:

Es raro que una película en fase de posproducción se enfrente a tres regímenes distintos con tres agendas distintas. Ninguno de ellos se desechó por mala voluntad, sólo por visiones diferentes.

Oh, bueno... otra anécdota más para contar del complicado multiverso ejecutivo de DC.

Para la información más completa, como siempre, sigan en La Cuarta Pared.