Esta es la clase de reviews que me gustan porque puedo hablar de más de una película. Esto se debe a que Sueño Florianópolis es la prueba de que la industria de cine argentina es un mundillo pequeño en el que todxs lxs directorxs se conocen y saben de los proyectos de cada uno. Porque la nueva película de Ana Katz parece ser la mezcla de dos películas que salieron el año pasado: Las Vegas, de Juan Villegas, y Familia Sumergida, de María Alché.
Por esas casualidades de la vida, no llegué a hablar de ellas aquí. Así que aprovecho. Igual no se preocupen, que no son joyitas olvidadas. Las Vegas es una comedia sobre una pareja separada que se reencuentra por casualidad en vacaciones de verano; él con su nueva pareja extranjera, ella con el desinteresado hijo adolescente de ambos. Por otro lado, Familia Sumergida es un drama sobre una mujer interpretada por Mercedes Morán que lidia con problemas personales, más específicamente, la reciente muerte de su hermana. También tiene sueños muy raros que se confunden con la realidad.
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| Mercedes Morán tiene sueño... Sueño Florianópolis, ¡claro está! |
¿Cómo es el vástago de estos filmes tan dispares entre sí? Morán interpreta a una mujer que se va de vacaciones a Brasil con su marido (Gustavo Garzón) y sus dos hijxs adolescentes, y lidia con problemas personales, más específicamente, el quiebre de su matrimonio y la indiferencia de sus hijos. En el viaje, se enamora de un carismático extranjero, interpretado por Marco Ricca. También tiene un sueño medio raro pero al final de la película nomás.
Sueño Florianópolis hace una pregunta muy simple: ¿para qué sirven las vacaciones? Para relajarse, pero también pueden ser tan exasperantes como la rutina del hogar. Para reevaluar las decisiones que uno ha tomado, pero eso es difícil cuando esas mismas decisiones te están chapoteando en la cara. O las dos cosas y otras más. Con su dirección ligera y apacible, Katz permite cualquier interpretación.
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| ¿Quién puede tener problemas con una vista como esta? Más personas de las que esperás, dice Ana Katz en su nuevo film. |
El resultado final podría ser mucho más. Algunas escenas (y en especial el final, que no quiero spoilear acá) parecen indicar que la intención original era explorar la dinámica de la familia, más que concentrarse sólo en el personaje de Morán. Ella mantiene un perfil bajo en su actuación, que es lo que el personaje requiere, pero con el efecto secundario de no destacarse sobre el resto del elenco.
¿Dos películas argentinas buenas dan a luz a otra película que no logra ser mejor? Quizás algunos verán otro síntoma del catastrófico estado del cine nacional. Yo digo que la culpa no la tienen nunca los artistas y que Sueño Florianópolis es un viaje placentero. Si no cumple todas las expectativas, bueno, ¿quién vuelve completamente satisfecho de las vacaciones? Si así fuera, nadie volvería a casa.
Entre los precios cada vez más altos y la asunción de Bolsonaro, aquellos que se han quedado con ganas de irse a Brasil este verano tienen una buena segunda opción en Sueño Florianópolis. En especial quienes sean fans de la obra de la directora Ana Katz.
VEREDICTO: 6.5 - BRASIL, MEU BRASIL BRASILEIRO...
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